jueves, 9 de agosto de 2012

LA EDUCACIÓN SUPERIOR

Por Raúl Hernández Viveros

De acuerdo con  Antonio Gago Huguet y Ricardo Mercado del Collado[1], se enfoca a la calidad de vida de una comunidad correspondiente a la sabiduría "natural" que los grupos humanos pasan de generación en generación. Este documento trata acerca de uno de esos retos: lograr que la educación sea de buena calidad. El tratamiento se hace, casi exclusivamente, en cuanto a lo que sucede en México en el momento presente, y con particular énfasis en la educación superior.
Destacan la educación en la calidad de vida de una comunidad forman parte de la cultura y educación que se transmiten los grupos humanos y pasan de generación en generación. La educación es  un factor del desarrollo económico y social; si la educación -o la sola instrucción- ha de ser un determinante en la calidad de vida de una persona, entonces la educación ha de ser no sólo un servicio público de fácil alcance para el universo de la población, sino una función social permanente de buena calidad.
Sustentan los cinco ejes: con los componentes, los procesos y los resultados de cada una de las funciones que realiza una Institución de Educación Superior (docencia, investigación, difusión, administración y gobierno). Por lo que los responsables de evaluar en la educación superior han construido esquemas y marcos de referencia. De diversas formas se adopta la idea de que la calidad de un programa educativo se establece en la medida que sea eficaz.
Se debe reconocer que la "eficiencia" estriba en la forma de usar los recursos. Se es eficiente en la medida que se aprovechan al máximo los elementos disponibles (personas, talentos, capacidades, tiempo, tecnologías, circunstancias, oportunidades, etcétera). La eficiencia agregada a la eficacia, con la cual se logran los objetivos y metas para aprovechar los recursos. -Los resultados de la evaluación con propósitos de financiamiento.
También agregan Antonio Gago Huguet y Ricardo Mercado del Collado que el procedimiento de evaluación, se conoce como "rendimiento de cuentas" (accountability). La eficiencia necesariamente ha de supeditarse al logro de los propósitos. En la práctica, la medida en que se obtiene un provecho óptimo de los recursos debe entenderse como un atributo adicional de la eficacia.
La vinculación de lo eficaz, eficiente,  pertinente y  lo trascendental, en un programa universitario será bueno, además, en la medida que sus resultados y beneficios permanezcan más tiempo, cubran más áreas de la cultura, impliquen mayor profundidad en lo que constituye la "formación de personas". Un programa educativo cuyos efectos positivos trascienden la etapa escolar y son parte de la herencia a lo largo de la vida, es mejor que uno que no lo logra.  La calidad atribuida a cada programa y a cada institución ya no debería seguir siendo un asunto de creencias, sino de evidencias.
Al conocer los atributos de cada programa e institución por vías más objetivas y racionales. La educación como un bien social -que tiene una evidente expresión de beneficio para cada individuo- lo cual deja de ser legítimo y auténtico cuando la capacitación, la instrucción o la educación toda no son de buena o excelente calidad.
Antonio Gago Huguet y Ricardo Mercado del Collado plantean as expectativas de evaluación que representan condiciones técnicas, jurídicas y económicas para propiciar y asegurar reacciones y decisiones. Un conjunto de estrategias y organismos de evaluación, o concebir esquemas y modelos, así como criterios, indicadores, parámetros e instrumentos de evaluación.
Sin  embargo, explican la necesidad de agregarse decisiones políticas de mejorar, substituir o reorientar recursos. Al mismo tiempo que resolver el problema cultural. Es la dificultad para ponerlas en práctica y actuar en consecuencia de manera sostenida. Sobre todo advertir las principales características y los distintos enfoques con que se realizan actividades para evaluar algún aspecto o función de la educación superior. Cada uno de los organismos e instancias que tienen a su cargo un programa específico de evaluación puede proporcionar información mucho más detallada y relevante según su propia concepción.
Es fundamental reconocer el papel del SINAPPES (Sistema Nacional de Planeación Permanente de la Educación Superior), porque su estructura formal prevé el funcionamiento coordinado y articulado de organismos de planeación en tres ámbitos: institución universitaria, entidad de la República y cada región del país.  En 1978 apareció la CONPES (Coordinación Nacional para la Planeación de la Educación Superior). Es la instancia, grupo de trabajo, que establece lineamientos y políticas generales para planear el desarrollo del sistema de educación superior (SINAPPES). Forman parte de su directiva el secretario de Educación Pública y la integran más de 20 personas que representan al gobierno federal a las instituciones educativas (públicas y privadas) y al sector empresarial. Un secretariado técnico instrumenta y ejecuta acuerdos, a partir de 1978 y aprobó la creación del SINAPPES.
En cada entidad federativa existe una "coordinación estatal" (COEPES). El intento de una organización regional ha fracasado, pero existe como una asignatura pendiente. La CONAEVA (Comisión Nacional de Evaluación para la Educación Superior). Es una instancia creada por resolución de  CONPES. La integran representantes del gobierno federal (SEP) y rectores de universidades. Su propósito es establecer un sistema para evaluar la educación superior con cobertura nacional.
            El proceso de acreditación es requerimiento imperativo a partir de 1972. Consiste en la acreditación: sistema de créditos  Unidad de valor de asignatura) Educación Básica y Superior. Reconocimiento habilidades y destrezas. Grados de estudio. Sujeto poseedor de un saber en determinado campo del conocimiento. La ANUIES ha emprendido los siguientes mecanismos  para obtener evidencia en la acreditación: Los Comités Interinstitucionales para la Evaluación de la Educación Superior (CIEES). Las acciones de evaluación institucional promovidos por la Comisión Nacional para la evaluación de la Educación Superior CONAEVA. La clasificación de los posgrados por parte de CONACYT. Los recursos a través del  fondo de la Educación Superior (FOMES)
En México la acreditación es el proceso de evaluación institucional y la revalidación se relaciona a los  a planes de estudio. En otros países el término es uniforme para dar reconocimiento a instituciones o programas. Para dar los alcances a la acreditación es necesario precisar lo siguiente: Los Consejos Universitarios están facultados a través de su Ley Orgánica,  para crear, modificar o rechazar los planes de estudio. Existen otros organismos nacionales que carecen de capacidad legal para acreditar programas por lo que sus recomendaciones son de carácter informal.
En Estados Unidos existen  agencias acreditadoras encargadas  de dictaminar  las IES ya que en su mayoría  son privadas. Tales agencias son de 3 tipos: nacionales a cargo de la acreditación institucional, regionales, y organismos privativos para programas específicos.
En una línea  del tiempo se puede mencionar que Gabino Barreda  Impulsó  la Escuela Nacional Preparatoria. Educación un instrumento fundamental de cohesión social. Métodos y capacidades creadoras. Construcción de las estructuras cognoscitivas fundamentales. Fue como una aproximación al método científico, y particularmente resultó un conjunto pedagógico coherente, teoría y práctica, abstracto y  concreto. Para este periodo  de la historia de México,  la educación hubiera sido obra de filósofos.
Con el proyecto de Estado Nacionalista, después de la Revolución mexicana, Justo Sierra fundó la Universidad Nacional de México, hoy UNAM. Inventó el lema: “Por mi raza hablará el espíritu”, que reflejaba el triunfo del mestizaje y el criollismo. No obstante Justo Sierra advirtió sobre la situación nacional: "Embrutecidos los hombres por todas las ignorancias, se entregan víctimas de la miseria y de la inmortalidad a toda clase de crímenes, y ni si quiera piensan en defender derechos cuya importancia no saben comprender."
Por su parte, José Vasconcelos puso en marcha la Secretaría de Educación Pública y reforzó la Escuela Nacional de Maestros. Su importante papel de impulsor de programas educativos lo hizo escribir: "La cultura engendra progreso y sin ella no cabe exigir de los pueblos ninguna conducta moral."  También con el grupo Ateneo se dotó a la educación en México de una visión más amplia y  crítica del pensamiento filosófico positivista y determinista. Tuvo sus pilares en la libertad de cátedra, la libertad de pensamiento y los valores culturales, éticos y estéticos.
Un cambio extraordinario fue la propuesta de Lázaro Cárdenas, con su Ley de Educación Socialista, en 1934. En su gobierno se fundó el Instituto Nacional de Estudios Superiores para trabajadores, e instituto Politécnico Nacional.   Años más tarde con el recibimiento de los refugiados españoles, exiliados de España por el general Franco, dio inicio el Colegio de México, A.C. (COLMEX), fundada en 1940 y tuvo como antecedente inmediato "La Casa de España" en México (1938-1940).
Posteriormente, el secretario de Educación Pública Jaime Torres Bodet propuso el cambio en el Artículo 3º de la Constitución, de 1934. Ya no será una educación dirigida a un fin específico o para un sector de la sociedad en particular, sino que se refleja una concepción de educación que se caracteriza principalmente por la formación moral del individuo, encaminada hacia el bien y la justicia. Más que una somera tarea de ilustración, o la simple habilitación de oficios y profesiones por el carácter de emergencia que vivía el país, se creyó que con la educación se lograba la "unidad nacional", y  permitiría llegar al reconocimiento que "...valora nuestra propia alma, estime la eficiencia de las virtudes y reconozca el lastre de los defectos"
En el sexenio de Adolfo López Mateos, todavía Jaime Torres Bodet impulsó una extensa campaña de alfabetización a lo largo y ancho de México con una idea firme: que cada estudiante del nivel obligatorio asistiera a la escuela con un libro de texto. De esta manera, nació la idea de crear la Comisión Nacional de los Libros de Texto Gratuitos (CONALITEG).
Luis Echeverría creó la Comisión Coordinadora de la Reforma Educativa.  En 1973 se legisló la Ley Federal de Educación. Estableció el Sistema Nacional de Educación para adultos, y  el Plan Nacional de castellanización. José López Portillo proyectó el Plan Nacional de Educación (PNE), y llamó la atención sobre diversos problemas de la educación preescolar: la demanda era baja, la distribución de oportunidades era desigual con una alta concentración en el medio urbano y con la atención casi exclusiva de los sectores medios y altos. Se identificaron bajos índices de eficiencia en los primeros grados de la primaria  que estaban asociados con la inasistencia de los niños a la educación preescolar.
Se respaldó el Programa “Educación para Todos”, y en 1978 comenzó la  Universidad Pedagógica Nacional. Al mismo tiempo la creación del Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (CONALEP) en 1979.  Miguel de la Madrid en su Plan Nacional de Desarrollo, interrumpió las tendencias expansivas que lo habían caracterizado en décadas anteriores.
Propuso el “Programa Nacional de Educación, Recreación, Cultura y Deporte”. La  modernización de la educación apoyó a escuelas en desventaja. Intentó abatir el rezago a la educación. Descentralizó la educación básica y normal,  desconcentró la educación superior. Creó consejos estatales de educación con representación de las autoridades federales, estatales y del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
Carlos Salinas de Gortari fomentó el Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica. Los planes y programas  concertaron con las entidades federativas las acciones necesarias para abatir y superar los rezagos en la materia. Se creó el Programa para la Modernización Educativa 1989-94: conformación de un sistema de mayor calidad, que se adaptara a los cambios económicos que requería el país en el contexto de las transformaciones mundiales. Se modificaron los artículos 3ro y 130 de la Constitución Política, propuso la Ley General de Educación de 1993.
Ernesto Zedillo abrió la cobertura del CONACYT. La vinculación académica institucional. El Programa de Mejoramiento del Profesorado, los cursos Nacionales de Actualización. La idea era fomentar la calidad de la educación, con el apoyo e impulso a profesores y alumnos mediante el programa “Progresa”. La Evaluación institucional, sostuvo el Programa del  Sistema Nacional de Formación Continua redes académicas, además del fomento a la investigación y el estudio de una segunda lengua.
Con Vicente Fox, se hizo la Reforma Educativa de Secundaria y Programa de Oportunidades. Las Escuelas de Calidad, apoyarían el crecimiento de la calidad, con la ayuda del Banco Mundial. Con el Instituto Nacional de Evaluación educativa, se proyectó el plan de Escuelas de Calidad. La Ciencia y tecnología fueron casi desaparecidas por falta de apoyos económicos. Un poco se difundió la cultura. Con en Banco Mundial se financiaron las pruebas, y evaluaciones de Enlace. 
El desastre educativo continuó con Felipe Calderón. Con la prueba Enlace 2012, tuvo que aceptar: “Ya estuvo bueno. Hemos sido y seguiremos siendo tolerantes, muy tolerantes, pero no permitiremos que se quebrante la ley y menos que se quebrante la ley para atentar contra una sola escuela: contra la educación, contra otras maestras u otros maestros y menos, menos toleraremos que se atente contra el derecho de los niños a recibir clase” “…que con tanto sacrificio paga el pueblo de México y que van a la educación pública se destinen precisamente a educar y no a otros propósitos políticos o de grupo, por muy respetables que sean”.
Mientras que durante este sexenio aumentó el corporativismo sindical, y tuvo presencia el sindicalismo universitario. Se recortaron presupuestos, siendo la UNAM una de las mayores afectadas, y en todos los centros de educación superior. Calderón designó a Fernando González Sánchez, subsecretario de Educación Básica de la Secretaria de Educación, yerno de Elba Esther Gordillo.
Hay que recordar que existieron la Confederación Mexicana de Maestros, la Liga de Trabajadores de la Enseñanza, la Universidad Obrera,  Federación Nacional de Trabajadores de la Enseñanza, 1934, el Frente Revolucionario de Maestros (después Sindicato Mexicano de Maestros y Trabajadores de la Educación), SNTE en 1949. La cohesión del SNTE con la unificación del Sindicato Mexicano de Maestros y Trabajadores de la Educación. A partir de diciembre de 1979, brotó la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación.
En 1979 SUNTU, se constituyó con  33 sindicatos de trabajadores de universidades del país. Con otra reforma al Artículo 3o se elevó a rango constitucional la Autonomía Universitaria, y reconoció la contratación colectiva en las universidades autónomas. Se les otorgó el reconocimiento a la sindicalización a los trabajadores académicos y administrativos en el apartado "A" del artículo 123 Constitucional, se aceptó el derecho a afiliarse en una federación, pero no al sindicato nacional. Durante la Asamblea Nacional, CONTU, XII, la clausura estuvo presidida por el secretario general de la CONTU y del FESAPAUV Enrique Levet Gorozpe en Veracruz, Ver.
No obstante, hasta nuestros días prosigue la evaluación que es la responsabilidad de las instituciones y del Estado. Con estos procesos de evaluación existe la posibilidad de evitar que en el futuro se conviertan en un mero trámite para tener acceso a los recursos financieros. La evaluación deberá evolucionar rápidamente hasta convertirse en un instrumento de garantía social y de certidumbre en la inversión educativa. Consciente de la importancia de la evaluación, la ANUIES realiza un trabajo conjunto con los gobiernos: federal y estatales, y estableció un Sistema Nacional de Evaluación y Acreditación de la Educación Superior.
Una educación de calidad, pretende formar cuadros académicos con capacidades no solo cognoscitivas si no con habilidades pedagógicas que fomenten el nacimiento de nuevos tipos de estudiantes, ciudadanos,  profesionistas y cuadros productivos vinculados a la sociedad. El Plan Nacional de Educación no atendió los índices de deserción escolar. Actualmente existen 9 millones de ninis, jóvenes que no trabajan ni estudian, y no alcanzan una educación eficiente, integral involucrada con la situación nacional.
La OCDE informó que el gobierno destina solamente entre el 0.39% y 0.4% a la ciencia y tecnología; y se ocupa el último lugar. El promedio que destinan otros países es del 2.3% del PIB.  El Programa Sectorial de Educación plantea dar continuidad al Programa de Mejoramiento del Profesorado (PROMEP), ampliar el número de becas a académicos de instituciones de educación superior para la realización de estudios de maestría y doctorado de calidad.  Además de aumentar las plazas de profesores que cumplan con alta capacidad en docencia, gestión académico administrativa y creación de nuevos conocimientos; fortalecer la labor de investigación en todos los centros, impulsar programas de asesoría y seguimiento de alumnos a lo largo de su formación y con ello mejorar el nivel académico. Esto forma parte de la retórica oficial y de Televisa y Tv Azteca sobre el control y manipulación de la conciencia nacional. Alfonso Reyes sentenció que: “A la hora del examen de conciencia –esa media noche del espíritu en que quisiéramos comenzarlo todo de nuevo- el faro de la etapa simbólica todavía puede iluminarnos”.    


[1] Plantearon en su investigación juzgar la calidad de una institución educativa (una universidad o una escuela) con base en la calidad de sus diversos programas (El currículo de cada carrera, cada proyecto de investigación, etcétera. Aclararon que "programa" es una categoría arbitraria. Ejemplos de "programa" son una licenciatura y un doctorado; también un proyecto de un centro de investigación o una campaña para difundir el conocimiento científico o la literatura nacional. Se ha preferido referir los criterios de calidad hacia cada "programa" por ser una entidad intermedia cuya desagregación permite evaluar a individuos, componentes, procesos y resultados con suficiente especialidad y particularidad para decidir acciones posteriores. De igual forma, la agregación de las evaluaciones de "programa" permiten caracterizar, e incluso evaluar, a instituciones educativas y subsistemas. Recomendaron la lectura de  CONPES-CONAEVA, Lineamientos generales y estrategias para evaluar la educación superior, SEP, México, 1991.

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